La Audiencia Provincial desestima las peticiones de nulidad de los acusados del crimen de Javier Ardines
La Seccion Segunda de la Audiencia Provincial rechazo una a una todas las cuestiones previas articuladas por las representaciones de los imputados por el asesinato del concejal de Llanes de IU, Javier Ardines, en el verano de 2018, por lo tanto ordena que continue la tramitacion de la causa. La Audiencia Provincial desestimo de este modo tanto la peticion de nulidad de los autos de incomunicacion dictados cuando se llevaron a cabo las detenciones del intermediario, Jesus Muguruza, uno de los sicarios, Djillali Benatia y el considerado inductor del crimen, Pedro Nieva, asi como la nulidad de la declaracion que Muguruza presto como testigo ante la Guardia Civil durante el transcurso de la investigacion, y en la que termino autoinculpandose, o la confesion parcial de Benatia que, segun el relato de la defensa, se hizo bajo presion. Tambien rechaza la Audiencia Provincial anular las escuchas telefonicas, entre otras muchas solicitudes realizadas por los representantes legales de los acusados.
Con respecto a la peticion de nulidad de los autos de incomunicacion dictados por la titular del Juzgado de Instruccion de Llanes cuando Muguruza, Benatia y Nieva fueron detenidos el 19 de febrero de 2019, la Audiencia Provincial no solo avala la decision judicial, sino que defiende que fue totalmente justificada. Aduce «la naturaleza grave del delito cometido, asesinato» y las «circunstancias subjetivas y objetivas» que concurrieron: pluralidad de autores, con participacion de sicarios como ejecutores de los hechos, existencia de posible autor intelectual y cooperador necesario, cuyos grados de participacion requerian de concrecion a la fecha de la detencion. Todo ello, alega, «hacia imprescindible que las diligencias policiales y judiciales dirigidas a su investigacion fueran practicadas con el mayor secreto».
En relacion a la solicitud de nulidad de la declaracion prestada ante la Guardia Civil el 10 de diciembre de 2018 por el presunto intermediario, Jesus Muguruza, y que fue fundamental para los investigadores a la hora de tirar del hilo, mas de lo mismo. Mientras las defensas alegan, en esencia, que fue citado como testigo y que la declaracion no fue interrumpida para tomarle declaracion como investigado, y aseguran que acabo autoinculpandose como consecuencia de las supuestas presiones a las que se vio sometido por la Guardia Civil, la Audiencia Provincial hace suyas las palabras de la Fiscalia y rechaza ese argumento. «Nada de ello resulta acreditado; ni la duracion de la declaracion ni las presiones denunciadas en este momento procesal. No hay indicio alguno de presion o coaccion alguna ejercida por la Guardia Civil sobre el testigo». Ademas, entiende que no se ha producido ninguna «irregularidad» porque Muguruza declaro inicialmente como testigo por cuanto a priori se desconocia que estuviera implicado de forma activa en los hechos.
En relacion a la supuesta declaracion bajo presion de Djillali Benatia, la Audiencia niega que pueda concluirse que, el hecho de que reconociera los hechos incriminatorios hacia el, sea «fruto de la vulneracion del derecho de defensa». Recuerda que su declaracion ante la Guardia Civil fue asistida por un abogado de oficio y, en lo que concierne a la declaracion judicial, «la mera presencia de varios agentes de la Guardia Civil, como convidados de piedra y sentados detras, no implica necesariamente que se generase un efecto de presion apreciable en el declarante».
Sobre las escuchas telefonicas, el tribunal considera que en la investigacion «concurren todos los requisitos que vienen exigiendo el Tribunal Constitucional y el Tribunal Supremo para la validez constitucional de esta injerencia en el derecho al secreto de las comunicaciones».
Frente a este auto las defensas pueden interponer recurso de apelacion dentro del plazo de cinco dias ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Asturias.
Javier Ardines fue asesinado a golpes y asfixiado en la madrugada del 16 de agosto de 2018, a escasos metros de su vivienda en Belmonte de Pria, cuando se dirigia a faenar con su embarcacion, la ‘Bramadoria’. El cadaver fue encontrado a las ocho de la mañana en el camino de acceso a la vivienda por un vecino que salia a pasear con su perro. Tras seis meses de ardua investigacion la Guardia Civil detenia a Pedro Nieva, Jesus Muguruza y Djillali Benatia y la jueza instructora solicitaba la extradicion de Maamar Kelli, preso en Suiza. Segun los investigadores, Nieva descubrio que su mujer, Katia Blanco, y Javier Ardines mantenian una relacion sentimental, por lo que decidio acabar con la vida del edil, para lo que pidio ayuda a Muguruza, quien le puso en contacto con los dos presuntos sicarios. Segun se recoge en el sumario del caso, Nieva y Muguruza llegaron a viajar con Benatia hasta Belmonte de Pria para darle indicaciones de las rutinas del concejal y planear el crimen. Los acusados, en prision provisional, se enfrentan a 25 años de carcel cada uno