El curso político acaba con un PSOE al alza, Sumar en caída y con mayoría de PP y Vox, según las encuestas
Las últimas encuestas del curso político, antes del verano, reflejan la confirmación de la tendencia marcada en los últimos meses. Las conclusiones son claras. Por un lado, PP y Vox conseguirían sumar mayoría absoluta. Por otro, el PSOE se mantiene al alza mientras que sus socios de Gobierno, Sumar, continúan su caída en las estimaciones ante unas elecciones generales.
Así lo refleja el último estudio de Key Data para Público. Según estos datos, el PP de Alberto Núñez Feijóo mantiene su primera posición, con un 34,1% de los votos y 148 escaños. “El PP parece estabilizarse en torno al 34% de los votos; cuatro puntos menos de los registrados antes de la precampaña europea”, destaca Paz Álvarez, directora técnica de Key Data.
Los populares tendrían un escaño más respecto al último estudio, publicado en el mes de junio. Estas cifras del PP suponen un resultado de 11 escaños más que los obtenidos en las últimas elecciones generales celebradas el 23 de julio de 2023.
En segunda posición resiste el PSOE de Pedro Sánchez. Tendrían un 30,3% y 127 escaños. Significan seis más que los obtenidos en el anterior estudio y también seis más que los que consiguió el 23J. “Al PSOE le sientan muy bien las campañas electorales y crecen casi dos puntos desde marzo”, apunta Álvarez al respecto.
Vox se confirma como tercera fuerza más votada una vez más. El partido de extrema derecha liderado por Santiago Abascal obtendría un 10,9% de los votos y 28 escaños. Su tendencia es a la baja, ya que en junio el estudio le otorgaba 32 escaños y un 11,8%.
El trabajo de campo de todas las encuestas publicadas hasta el momento es anterior a la ruptura de Vox con el PP, por lo que hay que esperar a septiembre para medir el efecto de esta en la intención de voto al partido de extrema derecha. “De momento, parece estar volviendo a los porcentajes de voto de marzo; ligeramente por debajo del 11%”, apunta Álvarez. La suma de PP y Vox, en todo caso, le daría 176 escaños, justo los necesarios para formar Gobierno.
Respecto a Sumar, las encuestas siguen afianzando su caída progresiva. En junio, el descenso los situaba en 15 escaños y un 8% de los votos. Este mes, el espacio de Yolanda Díaz baja todavía más y se quedarían en 10 escaños y solo un 6% de los votos.
Mientras tanto, Podemos va creciendo poco a poco, asegurándose su presencia en la Carrera de San Jerónimo. Mientras que el último estudio de junio solo reflejaba un escaño para la formación morada, por Madrid, ahora este último les otorga cuatro y un 3,7%.
Los parlamentarios del partido que lidera Ione Belarra vendrían de Madrid (2), Andalucía y Catalunya. Sumar solo obtendría representación en Madrid, Andalucía, País Valencià y Catalunya.
Por su parte, la última fuerza política en irrumpir, Se Acabó la Fiesta, del agitador ultra Alvise Pérez, también tendría representación en el Congreso. Pérez, ahora eurodiputado, anunció esta semana que se presentaría a unas generales cuando se convocaran. Esta candidatura tendría dos escaños y un 3,3% de los votos. En todo caso, la directora de Key Data apunta a que todavía “es pronto estimar su evolución”.
Respecto a los partidos independentistas, no se observan grandes cambios. EH Bildu podría mantener sus actuales seis escaños y PNV podría obtener otros seis, uno más que el 23J. En Catalunya, Junts podría sumar uno más que el pasado año, llegando a ocho, y ERC se mantiene con sus actuales siete. El BNG, tras unas buenas elecciones autonómicas, podría tener dos, uno más que en la actualidad.
Por bloques, el de PP, Vox y SALF tendría hasta 178 escaños y más del 48% de los votos. PSOE y Sumar por sí solos se quedan en 137 escaños y un 36,3%. Si se les suma la mayoría de investidura de Sánchez, que incluye a PNV, EH Bildu, ERC, Junts, BNG y Podemos, se obtendrían 170 escaños, insuficientes para formar Gobierno.
El estudio elaborado por Key Data para Público es un análisis desk research de toda la información disponible, tanto del comportamiento electoral del ámbito de la elección y su evolución como de todas las encuestas, publicadas o no, a las que se ha tenido acceso. Con toda esa información y aplicando las ponderaciones correspondientes, se llega a una estimación de voto sobre la que se aplica la ley electoral para asignar escaños.