Xavi inicia su despedida con esta frase: “No descarto volver”
El entrenador se ha echado a un lado creyendo que su presencia les tensionaba y por eso anunció su despedida, aunque no se va. Y, sin irse, prevé que un día regresará al banquillo, a asumir de nuevo esa labor de entrenador “cruel y que quita calidad de vida” como la calificaba en la rueda de prensa previa a la cita con Osasuna (el partido de la jornada 20 que fue aplazado) de este miércoles (19 h.).
“No descarto volver. Ya lo he dicho muchas veces: soy un hombre de club y el club me tendrá a disposición para lo que necesite. Pero ahora no me necesita”
Cuestión de valoración
No fue la única. Explicó, entre otras cosas, que en verano ya manejaba la idea de que esta temporada fuera la última y, sin embargo, renovó el contrato en septiembre. Afirmó que se sentía valorado “dentro del club” y también que no se sentía “suficientemente valorado” teniendo en cuenta las circunstancias difíciles que se viven en el Barça entre la deuda y el límite del ‘fairplay’ para fichar. Aunque se haya gastado 30 millones (más 31 en variables en Vitor Roque).
“Tengo la sensación de que haga lo que haga y diga lo que diga no es suficiente, tengo la sensación de que no me van a comprar nada, por eso me marcho”
Pero Xavi accedió a dar ese simbólico consejo al futuro y desconocido sucesor: “Que sea él mismo, que sea natural, que haga lo que sienta no se deje influenciar”. Xavi ha aplicado esas máximas y se despedirá “orgulloso” y con “la conciencia tranquila”. “Le aconsejaría que disfrutase, pero es imposible”.