Gisela presenta a su hijo Indiana, nacido tras un complejo embarazo: “Mi vida es mía y nada ni nadie va a enturbiar mi felicidad”
La artista de OT posa junto a su pareja y recuperada ya de la operación de riñón que sufrió a los pocos días del parto. “Lo más duro -del embarazo- ha sido los problemas con el riñón y las operaciones relacionadas con ello. Tener que llevar un cateter durante cuatro meses ha sido muy doloroso”.
Eso hace que el embarazo no haya sido la etapa feliz que habría deseado. “No lo voy a olvidar nunca, y para mí es algo que creo no se va a poder repetir, así que tengo que quedar con esta experiencia. Tenerlo en mis brazos es de las cosas más maravillosas y brutales que me han pasado nunca”.
El bebé se parece, en opinión de su madre, a su padre. Ambos encaran estos días como “un cambio de vida radical. Aparecen muchas dudas, muchos miedos, mucho cansancio, no dormir… Pero con mucha ilusión, muchas ganas, intentando disfrutar de las pequeñas grandes cosas”.
También el nombre del pequeño suscitó un debate en las redes sociales. Gisela lo tenía claro: “Al principio no queríamos saber el sexo del bebé y buscamos un nombre unisex que no tuviera traducción. Es un nombre que nos gustaba a los dos sin haberlo hablado”.
Gisela da a su hijo una lactancia mixta, por problemas del bebé, que fue un poco prematuro y tuvo algunos otros sobresaltos como ictericia y una hipoglucemia. “Yo le doy el pecho todo lo que puedo, seguiré peleando por la leche materna”.