‘¡Xavi sí, Laporta no’ (con silbidos)
Como hiciera con Ronald Koeman, Laporta ha dejado en vilo a Xavi. Dos leyendas, humilladas públicamente, obligadas a manifestarse ante los diferentes micrófonos y en ruedas de prensa sin la información que el mínimo decoro exige. Ha tomado el mandatario una decisión que, por lo que parece, ni siquiera ha consensuado con Deco, ya de regreso de Portugal y presente en Montjuïc. Todo a golpe de vehemencia, la continuidad y la salida.
E insistió Xavi en la ilusión que tiene sobre la próxima temporada. “Tenemos que estar unidos todos en el club. En ilusión, en ambición… La mía no ha cambiado”. Los cánticos generales a su favor le dieron fuerza. “Siempre he tenido la estima de la afición. Muy emocionado”, dijo.
Quizá en los reproches de la grada también interviene la sensación de improvisación en el ámbito institucional, con la economía hecha trizas y el escándalo de los avales. Difícil de saber en un estadio repleto de turistas y la masa social titular en casa. De nuevo, baja asistencia. Apenas 35.000 asistentes en Montjuïc.