El ultimátum del rey Carlos III a su hermano el príncipe Andrés: “La paciencia tiene límites”
Aunque el duque de York se retiró de la vida pública de la familia real británica en 2019 a raíz del escándalo de Epstein, condenado por tráfico sexual de menores, ha continuado recibiendo una asignación económica de 249.000 libras al año, según recoge Daily Mail.
La intención de Carlos III sería que su hermano Andrés instalase su nuevo hogar en Frogmore Cottage, una residencia mucho más modesta que la mansión de 30 habitaciones en la que vive actualmente, y que ya albergó al príncipe Harry y Meghan Markle antes de mudarse a EE UU.
Sin embargo, la negativa del príncipe Andrés están minando la compostura del monarca: “Todo el mundo es consciente de su bienestar y se preocupa por sus mejores intereses, pero la paciencia y la tolerancia tienen límites“, cuentan fuentes cercanas a The Times.
Según este amigo del rey Carlos III, “tal como están las cosas, la vida en Royal Lodge será cada vez más fría e incómoda para el duque”, sostiene.
Por su parte, Daily Mail explica que el príncipe Andrés firmó un contrato de arrendamiento por 75 años, en el que se comprometía a pagar 250 libras esterlinas a la semana, así como a mantener en buen estado la enorme propiedad.
Como parte de este acuerdo, el duque de York debía llevar a cabo trabajos de reparación en la mansión, que todavía no se han realizado. Su negativa a abandonar la vivienda podría empeorar su situación si finalmente el rey Carlos III recortase su asignación real, ya que no podría cubrir los costes de mantenimiento. No obstante, fuentes cercanas a Andrés defienden que el duque “no irá a ninguna parte”, en virtud de ese “férreo contrato” de arrendamiento.