La emotiva despedida de Rudy Fernández: ovación de quince minutos, muchas lágrimas y un recuerdo inolvidable
Ya nadie miraba a un partido sentenciado, todo el mundo aplaudía a la leyenda que tampoco esperó al fin del tiempo en la cuenta atrás. Se pudo en pie y entre lágrimas agradeció con aplausos una ovación que seguiría durante más de un cuarto de hora.
Suyo fue el protagonismo total de una noche en la que hasta Chus Mateo cedió su turno de palabra. También él, emocionado, apenas pudo pronunciar unas pocas palabras de agradecimiento a su jugador, reconocido por la grada también con una placa conmemorativa del momento.
Rudy fue el último en abandonar el parqué en su última vez, pues aunque podría regresar en un quinto partido, no parece que el músculo de este Real Madrid permita una remontada de UCAM Murcia en casa. También es deseo de Rudy, tal y como aclaró en declaraciones a pie de pista, no volver a jugar en casa si la victoria lo permite tras una noche verdaderamente mágica.