
Sin percepción del riesgo


Recuerda, asimismo, la ley de protección a los menores del Gobierno, que aterrizó en el Congreso de los Diputados en marzo, y que desde entonces no ha dado ningún paso más. La norma recoge una batería de medidas, como penas de entre uno y dos años de cárcel por falsificar imágenes sexuales con IA; que todos los dispositivos tecnológicos vengan de fábrica con control parental; órdenes de alejamiento virtual; y la elevación, de los 14 a los 16 años, de la edad permitida para crearse un perfil en redes sociales.
«Creemos que la parte más difícil va a ser regular el tema de las plataformas y empresas digitales, pero confiamos en que la lety avance», señala Perazzo, que considera crucial la colaboración de las plataformas tecnológicas. «Al final, nada está diseñado teniendo a la infancia en mente y hay cuestiones que no pueden quedar así y es necesario que se involucren. En este informe, llamamos la atención sobre todo lo que tiene que ver con la pornografía infantil y en cómo la detección, identificación y bloqueo de este tipo de contenidos necesita una participación activa estas empresas», zanja.