El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes nueve medidas contra el «genocidio» de Israel contra la población palestina. Entre ellas destaca la aprobación, este martes en el Consejo de Ministros, de un real-decreto ley para garantizar jurídicamente el embargo de armas como adelantó Público.
También se establecerá la prohibición de importar productos procedentes de los territorios palestinos ocupados. El objetivo es «combatir estas ocupaciones, frenar el desplazamiento forzoso de población civil palestina, y mantener viva la solución de los dos Estados».

Sánchez ha hecho estos anuncios en una declaración institucional realizada en Moncloa. «No van a bastar para frenar la invasión y los crímenes
de guerra pero esperamos que sirvan para añadir presión contra Netanyahu y su Gobierno,
aliviar el sufrimiento de la población palestina y que para que la ciudadanía española sepa que su
país, ante este infame episodio, estuvo en el lado correcto de la historia», ha destacado Sánchez.
Entre las medidas «para detener el genocidio, perseguir a sus ejecutores y apoyar a la población palestina», según ha explicado Sánchez, también se encuentra la «prohibición del tránsito a todos los barcos que destinen combustible» a Israel, la «denegación de entrada a España a todas las aeronaves que transporten materia de Defensa israelí» o la «prohibición de acceso a todas las personas que participen de forma directa en el genocidio» contra la población de Gaza.
El paquete anunciado por Sánchez se completa con la limitación máxima de los servicios consulares prestados a los ciudadanos españoles que viven en los asentamientos ilegales de Israel en territorio palestino (se reducen «a la mínima asistencia legalmente obligatoria); el aumento del apoyo a la Autoridad Nacional Palestina para incrementar los efectivos en la Misión de Asistencia Fronteriza que la UE tiene en Rafah y el establecimiento de nuevos proyectos de colaboración en los ámbitos de la agricultura, la seguridad alimentaria, y la asistencia médica; la ampliación de la dotación económica a la UNRWA, agencia de refugiados palestinos, con 10 millones de euros adicionales, y un aumento de la ayuda humanitaria y de cooperación para Gaza hasta llegar a los 150 millones de euros.
Al comienzo de su intervención, el líder del Ejecutivo ha recordado que el «pueblo judío» ha sufrido innumerables persecuciones, siendo el Holocausto «la más atroz de todas». Por ello, ha dicho, «merecen tener un Estado propio y sentirse seguro en él». Sánchez ha reiterado en este punto su condena a los «ataques terroristas de Hamás» y el apoyo de España al «derecho de Israel a existir».
«Pero con
la misma convicción el Gobierno cree que una cosa es proteger tu país y otras
bombardear hospitales y matar a niños inocentes», ha destacado a continuación. El presidente ha incidido en que lo que está sucediendo contra la población palestina es un «genocidio» y que «los datos hablan por sí solos». «La comunidad internacional no lo está sabiendo detener», ha añadido, al tiempo que ha deslizado la «complicidad» con el Gobierno de Netanyahu para explicarlo.
«España
no tiene bombas nucleares. Nosotros solos no podemos detener la ofensiva
israelí», ha añadido Sánchez. Pero ha puesto en valor que España haya adoptado «medidas valientes» como la presentación de varias resoluciones en la ONU, el apoyo a las causas judiciales internacionales abiertas, el envío de ayuda humanitaria a Gaza o el apoyo a la UNRWA. Todo esto más allá de «procesos políticos clave» como el reconocimiento del Estado de Palestina oficializado en 2024 o la suma de apoyos para la celebración de una conferencia internacional que ponga encima de la mesa la solución de los dos Estados.