
«Un año para ir trasladando a los niños»
«Como si fueran paquetería»
El PP, mientras tanto, se mantiene en la crítica. Los de Feijóo acusan al Gobierno de tratar a los menores migrantes «como si fueran paquetería» y de usar la inmigración «para dividir y contentar a sus socios independentistas». Para los populares, el decreto es una cesión a Cataluña y País Vasco, que son las únicas dos autonomías a las que, según los cálculos del Ejecutivo, no les tocará acoger a ningún menor migrante por su «esfuerzo previo». Aunque Cataluña se ha comprometido a acoger de forma voluntaria a 31 menores, que son los que se les suele asignar en las Sectoriales anuales que se llevan celebrando los últimos tres años.
Las autonomías populares, hasta ahora, solo han alegado que sus servicios jurídicos han considerado que el decreto del Ejecutivo es inconstitucional, pero no terminan de indicar qué harán en el caso de que llegue ese 28 de agosto y empiecen a llegar los menores migrantes a sus territorios.
«La ley se va a cumplir. Si las comunidades autónomas del PP están planteando que no van a cumplir la ley, tendrán que verbalizarlo», aseveró Sira Rego, quien calificó de «inaudito» que los populares defiendan «que el recurso ya le habilita para incumplir una ley». La ministra prefiere no adelantar acontecimientos aunque, según aseveró el jueves, cuentan con «mecanismos» suficientes para asegurar la aplicación de la norma, «una serie de garantías» recogidas en la ley, incluida la posibilidad de interponer las «reclamaciones necesarias» ante la Fiscalía. Pero, hasta entonces, defiende ir «paso a paso», es decir, seguir con los plazos fijados por su departamento para comenzar con una medida que ha costado años sacar adelante.