

La falta de austeridad de los reyes, que han aumentado notablemente su presupuesto desde que están en el trono (enero de 2024) y su afán de descansar fuera del país se han convertido en temas controvertidos para la imagen de Federico, que de joven, tenía fama de juerguista y de estar poco implicado con lo que hoy sus deberes como rey.
La anécdota ha sido que a su llegada a Jutlandia, donde se supone tendrán vacaciones públicas, con sus hijos Vicente e Isabella, la reina Mary ha sufrido la picadura de una avispa, aunque sin consecuencias.
La localidad danesa de Gråsten, a unas tres horas en coche de Copenhague y a orillas del fiordo de Flensburg, es el destino vacacional de los reyes de Dinamarca, en cuyo palacio Federico y Mary van a pasar su segundo verano como reyes.