«A todos ellos les digo que España es vuestra casa», prometió el presidente del Gobierno. Y retó a los aliados del primer ministro de Hungría, Viktor Orban, «tanto dentro como fuera» de España: «Aquí no se retrocede, se avanza, se mira hacia adelante, aquí se vive con orgullo de país y orgullo de su gente».
Zapatero pide a los socios cerrar filas con Sánchez
Por su parte, el expresidente Zapatero fue aún más claro a la hora de cargar tanto contra la extrema derecha como contra los miembros de la Conferencia Episcopal, que hace unos días pidió públicamente la celebración de elecciones generales asegurando que «es lo que conviene a España por encima de intereses de partidos». «Hace 20 años, una parte de esta sociedad, con la hipocresía que le caracteriza, salió a la calle, y a mí me acusaron de ser más o menos el diablo. Entre ellos había muchos obispos, de la mano del PP. Curiosamente, 20 años después han vuelto a salir a pedir elecciones otra vez. Y yo pienso que por qué no pidió la Conferencia Episcopal elecciones en los 40 años de la dictadura de Franco, al que llevaron bajo palio», espetó Zapatero.
«Les pido un poco de prudencia» si es que «no aprendieron hace 20 años» que ese tipo de presiones no funcionan, planteó el expresidente, que también pidió a la sociedad tener «esperanza». Eso sí: «Esa esperanza», dijo se da cuando la mayoría progresista está activa y no se despista, está consciente y con fuerza y autoestima». Y, por si la llamada a los socios parlamentarios del Gobierno al cierre de filas con la Moncloa no había sido suficientemente clara, Zapatero elogió el acuerdo alcanzado por España con la OTAN para no elevar el gasto militar hasta el 5% asegurando que «el presidente Sánchez ha conseguido que podamos tener derechos sociales, becas, bienestar y dignidad, durante los próximos años gracias a su valentía y determinación».