Ana Obregón no perdona a Alessandro Lecquio: así será su venganza
Todavía no se ha producido el último asalto entre Alessandro y Ana. Fuentes cercanas a la actriz afirman que ha llegado a su límite, que está dispuesta a contar, recordar (o fabular) episodios nunca antes radiados de su relación con el conde. La maquinaria está en marcha y Ana tiene sed de venganza. No pasará demasiado tiempo hasta que dé un paso al frente para crispar todavía más un ambiente ya de por sí altamente inflamable.
Ana no está sola. Me consta que toda su familia ha cerrado filas en torno a ella. La apoyan en cada una de las decisiones que está tomando en relación a este y otros asuntos de especial relevancia. Aunque, eso sí, le han aconsejado que se aleje un poco de la primera línea de fuego, sobre todo porque su prioridad ahora es, y debe ser, su hija Anita.