La FIFA y la UEFA evaluarán la intervención del Gobierno para ver si puede afectar a la independencia de la RFEF
La Comisión Directiva del CSD volverá a reunirse el día 30 para analizar la situación general de la RFEF y llevar a cabo, en su caso, nuevas actuaciones en relación con el expediente disciplinario abierto al Pedro Rocha, sobre el que se pronunciará el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) en las próximas semanas.
El CSD nombrará a los miembros de la citada comisión, que tendrá un nivel jerárquico superior a la RFEF, según el organismo, que afirmó mantener conversaciones permanentes con la FIFA desde hace semanas y que todas sus actuaciones se hacen en coordinación con esta.
Tanto la FIFA como la UEFA pidieron hace una semana en un comunicado conjunto una solución para garantizar la elección de un nuevo presidente para la RFEF y, a la vez, aseguraron que seguirán apoyando y colaborando con ella en este momento crítico por el bien del fútbol español.
Los Estatutos de la FIFA establecen que sus federaciones miembro se administrarán de forma independiente y sin injerencia de terceros, así como que sus órganos federativos se designarán mediante elección o nombramiento interno.
La FIFA no reconocerá a ningún órgano de una federación miembro, ni sus decisiones, que no haya sido elegido o nombrado internamente.
El incumplimiento de esta independencia puede derivar en la suspensión y hasta expulsión de la federación, a petición del Consejo de la FIFA, decisión que conlleva sanción deportiva.
“En circunstancias excepcionales y tras consultarlo con la confederación correspondiente, el Consejo podrá retirar de su función a los órganos ejecutivos de federaciones miembro y reemplazarlos por un comité de regularización durante un periodo determinado”, añade.
La normativa señala que “el Congreso podrá suspender a una federación miembro únicamente a petición del Consejo”. “No obstante, sin el voto del Congreso el Consejo podrá suspender temporalmente y con efecto inmediato a aquellas federaciones miembro que violen gravemente sus obligaciones. La suspensión del Consejo mantendrá su vigencia hasta el Congreso siguiente, salvo que el Consejo levante la sanción antes de la celebración del Congreso”, agrega.