El PP gana las elecciones, el PSOE aguanta, Vox sube y Alvise irrumpe con tres escaños, los mismos que Sumar
En el bloque de la izquierda, el único que aguanta con cierta solvencia es el PSOE. Los socialistas pierden 2,7 puntos porcentuales con respecto a sus resultados de hace cinco años y no logran disputar el primer puesto al PP, como habían llegado a aventurar en los últimos días sus principales dirigentes. No obstante, su caída supone tan solo perder un eurodiputado y quedar por encima de la barrera psicológica del 30% de los votos.
Todo lo contrario ocurre en los partidos a la izquierda del PSOE. Sumar se hunde con respecto al 10% de los votos que obtuvo Unidas Podemos en 2019, un resultado que entonces se consideró un batacazo pero que ahora más que duplica el porcentaje de voto obtenido por la coalición de Yolanda Díaz. El resultado de Sumar, además, deja fuera del Parlamento Europeo a IU por primera vez desde su fundación en 1986, lo cual aboca a la formación a una grave crisis interna de impredecibles consecuencias, puesto que IU es el único partido que aporta estructura a Sumar fuera de Madrid y Cataluña.
A todas esas malas noticias para la vicepresidenta se suma el hecho de que tan solo consigue superar a Podemos por la mínima. En las primeras elecciones en las que ambas formaciones se han presentado por separado, los morados se han quedado a apenas 1,3 puntos porcentuales de superar a los de Díaz, que precisamente ha basado su organización en la tesis de que Podemos estaba muerto.
El resultado del espacio a la izquierda del PSOE, en cualquier caso, es paupérrimo: entre Sumar y Podemos solo reúnen el 7,9% de las papeletas, cuando ambas formaciones, unidas, lograron un 12,3% en las elecciones generales de hace menos de un año. Ahora Repúblicas es la única coalición progresista que puede darse por satisfecha, puesto que logra retener sus tres escaños pese al momento de debilidad de ERC, muy tocada tras su batacazo en las elecciones catalanas.
En conjunto, el bloque que forman la derecha (PP)y los dos partidos de ultraderecha (Vox y Se Acabó La Fiesta) alcanza un 48,4% de los votos y 31 de los 61 eurodiputados que envía España al Parlamento Europeo. Los otros 30 escaños se los reparten las formaciones que apoyan en España al Gobierno central, aunque no todas son de izquierdas: los partidos netamente progresistas (PSOE, Sumar, Podemos y la coalición Ahora Repúblicas de ERC, Bildu y BNG) se quedan en un 43% de las papeletas y 28 actas, mientras el PNV suma una y Junts, otra más.
La participación en las elecciones fue tan solo del 49,2%, once puntos y medio por debajo de los comicios europeos de 2019, en los que votó un porcentaje inusualmente alto de ciudadanos porque en España coincidieron con las elecciones locales y con autonómicas en 12 comunidades. Sin contar con esos comicios, la participación de ayer fue la más alta desde 1999.