Los abogados de Lively consideraron el fallo de Liman «una victoria» para la actriz y otros a quienes Baldoni «arrastró a su demanda de represalia», y dijeron prepararse para la «siguiente ronda»: reclamar gastos y daños contra él y su productora, Wayfarer, por su «abusivo litigio», según recoge Variety.

El juez Liman opinó que las acusaciones iniciales de Lively las hizo en un tribunal civil de California y están protegidas de contrademandas por «inmunidad» judicial, y agregó que también el trabajo del New York Times está protegido por los derechos a la libre información.

El letrado consideró además que las declaraciones del marido y la publicista de Lively sobre el supuesto acoso de Baldoni no constituyeron difamación, porque se basaban en la versión de los hechos de la actriz.

Por su parte, Baldoni ha negado todas las acusaciones de acoso sexual y represalias presentadas por Lively, cuya demanda llegará a juicio el 9 de marzo de 2026.