Alegría igualmente mostró su respaldo —y el de todo el Ejecutivo— a García Ortiz, como ya hiciera el lunes el ministro de Justicia y Presidencia, Félix Bolaños. «Este Gobierno mantiene su total confianza en el fiscal general del Estado y en la Fiscalía por el magnífico trabajo que realizan persiguiendo el delito, y aprovecho para negar rotunda y categóricamente que hubiera instrucciones por parte de Presidencia del Gobierno a la Fiscalía General del Estado», aseguró la ministra portavoz, que insistió en que «esto no sucedió nunca» y lamentó «que el Tribunal Supremo haga estas afirmaciones sin ninguna prueba».
En la misma línea, Alegría insistió en que «hay jueces dando señales difíciles de comprender», y defendió que «la Fiscalía y el fiscal general del Estado están haciendo su trabajo, que es perseguir el delito, y el Gobierno siempre va a estar a su lado». «Vivimos en un Estado derecho, la presunción de inocencia forma parte de él, y máxime en este caso», puesto que «este auto no es firme, cabe recurso», abundó la ministra portavoz, que además aseguró que, a juicio del Ejecutivo, «la mayor parte de jueces y fiscales» merecen la «máxima confianza» y no son merecedores de que se ponga en duda su «honestidad».