Un músico y una enfermera veterinaria: así son Daniel y Lucía, los mellizos de David Summers
Ambos son hijos de una rara avis en aquella Movida Madrileña donde la libertad -sobre todo, la sexual- había llegado después de la represión vivida durante tanto tiempo por la dictadura de Franco. Para David Summers, aún así, no había duda: había encontrado a su media naranja aún cuando estudiaba en el colegio. Pero incluso antes de eso, por supuesto, ya estaba claro que su mundo sería la música, en gran parte ampado porque provenía de una familia de artistas: tocaba el clarinete, la guitarra y el bajo.
Pero el sueño había comenzado en 1982, año de formación de la banda. Tras algunos sencillos, en 1985 publican su álbum debut homónimo, que contiene el tema Devuélveme a mi chica, cuyo éxito da pie a que su padre dirija la película Sufre mamón en 1987, ficcionando los orígenes de la banda. En su rodaje, David y Marta, que interpreta a Patty, congenian a tal punto que se hacen pareja. Ella tenía 17 años, aunque el cantante la había conocido un par de años atrás.
El 8 de marzo del año 2000 habían nacido Lucía y Daniel, sus mellizos, que tan celosamente sus padres alejaron de la prensa. Vivían en un chalet en el barrio de Arturo Soria, así como tenían otra residencia en uno de los lugares más paradisíacos de España: Zahara de los Atunes, en la provincia de Cádiz. “Ellos son la canción más bonita, el aire más puro, el suspiro de mi amanecer. Os quiero, hijos míos, más que a nada en el mundo”, les felicitó su padre en 2021.
Asimismo, Dani estudia música y producción musical en la escuela de Arte y ha dado sus primeros pasos: con un grupo llamado Las Abejas Rojas ha hecho versiones de clásicos del pop y del rock; ha grabado su primer single, llamado Estrella, y su primer dúo -con Oihan, Ahora que sí, ahora que no-; ha tocado en concierto al lado de su padre (y durante el confinamiento fueron famosas sus covers conjuntas); e, incluso, le ayuda con las maquetas en el estudio, si bien en la versión final, dijo su padre, toca su compañero de toda la vida, Rafa Gutiérrez.
Lucía es, de profesión, enfermera veterinaria, si bien acabó especializándose en animales domésticos, exóticos y ecuestres. Asimismo, a sus 22 años, la joven es una apasionada de los piercings y tatuajes, teniendo su propio estudio en la capital y que tiene por nombre Clear Amethyst Piercing. Ambos, huelga decirlo, suelen subir mucho contenido relacionado con lo orgullosos que estánde su padre, así como también se muestran muy unidos a su madre.